28 diciembre 2007

Desparejamientos

Yo sé mucho de desparejamientos: voy desparejado por doquiera, empujado inexplicablemente por el mismo viento que perturbaba el espíritu de la protagonista de Chocolat, esa deliciosa artista del chocolate encarnada por Juliette Binoche que cambió con sus mañas confiteras la existencia, y la convivencia, de algunos de sus vecinos atormentados por sus propios fantasmas educativos. Como suele decirse, a mí me da la ventolera, pero no es de estos desparejamientos, sino de los lingüísticos, de lo que van mis líneas de hoy, y en concreto de los dos que he detectado en México.

El primero concierne a la orientación. Acá, las ciudades suelen organizarse en cuatro puntos cardinales: Norte, Sur, Oriente y Poniente. El hecho de que no sea Norte, Sur, Este y Oeste ya supone un desparejamiento, una cierta alteración de lo que cabría esperar (suponiendo que haya algo que esperar, que no lo tengo del todo claro), pero me refiero ahora a la dualidad Oriente/Poniente. Tengo para mí que las parejas correspondientes en lógica son Oriente/Occidente y Levante/Poniente, así que esa mezcla en la que desaparecen Occidente y Levante me resulta chistosa.

El segundo lo advertí ayer porque, aunque me consta desde apenas llegué a México hace varios años, nunca le había prestado atención desde este punto de vista lingüístico. Me explicaré (aunque no con prisa).

Ayer, el carro que renté, el vochito ya descrito, se quedó sin batería. Parece que los escuincles se meten en los carros y les prenden las luces por hacer broma, y a fe que lo consiguieron. [Nota: Esta es la versión oficial, porque la versión cierta a ciencia plena es que yo me dejé las luces prendidas la tarde anterior, que con mi cabeza aneuronada es lo habitual. Fin de la nota; sálvese a los escuincles locales, que no fueron ellos.] El caso es que me quedé sin batería, como decía, y entré en un restaurantito a pedir ayuda en forma de cables y un vehículo con batería funcional, para hacer el puente pertinente. El muchacho del restaurante hizo la indagación diagnóstica preliminar de quien conoce el problema: “¿El auto es estándar o automático?”. Obvio las mecanicidades de lo que siguió porque no hacen al caso: baste saber que se resolvió mi cuita y cené en Sayulita.

El asunto de marras es eso de estándar/automático. No está claro cuál es la pareja de estándar, pero sí parece más claro que lo contrario de automático es manual. Y... bueno, pues nada más, eso mero: que en México le dicen auto estándar al auto de toda la vida, en el cual las marchas se introducen manualmente. Por cierto que al embrague le dicen /clotch/ (del inglés clutch, que es también como ellos lo suelen escribir).

A ese respecto, y ya que estamos, me destacar cómo las pronunciaciones mexicanas de ciertas palabras inglesas siguen los usos tejanos, donde estas úes se convierten en oes en lugar de las aes supercerradas de otras variantes de pronunciación inglesa. A modo de ejemplo, la palabra lunch, que se usa de común entre el público general acá (como curiosidad, ¡esta palabra lleva en el DRAE desde 1929!), la pronuncian /lonch/.

Menudo rollo. Menos mal que ayer compré cuatro docenas de ostras pacíficas y dos docenas de almejas pata de mula, que hice pasar luego luego al refrigerador para que se pongan fresquitas y agradables, con vistas a zampármelas con mucho conocimiento y respeto en los próximos días.

Y ahorita me voy a dar un masaje, porque he sido güeno, acabo de terminar un trabajo y me merezco los apachurramientos qué caray antes de que el mentado aire transportador me lleve a otro sitio, que será no tardando.

En San Pancho, el día de los Santos Inocentes, al mediodía.

Mus

4 Comments:

Blogger Geococcyx manifestó al respecto que...

Estimado Mus:
Veo que te has fijado en el desparejamiento cardinal que impera por estas tierras. Hablé de ello el verano pasado, aunque se me olvidó el desparejamiento respecto a N-S.
Aquí el enlace
Llama la atención, pero no les pidas explicaciones a los mexicanos: sería como preguntarle a un chileno por qué las empanadas de pino se llaman, precisamente, "de pino"...
Me llama la atención que pudieras alquilar un vocho: no pensé que estuviera en los catálogos de las casas de alquiler. Respecto al cambio estándar o automático, ahí se han apegado a la nomenclatura del inglés americano: "standard shift" o "automatic shift/car" (en inglés británico dicen más bien "manual gear" y "automatic gear"). Lo de la "u" como "o" también llama la atención. Ni siquiera tengo claro que sea el acento tejano. Incluso a veces la pronuncian así en palabras como "curse", donde el sonido es como e neutra larga. En fin... ¡Feliz estancia en Nayarit!

28/12/07 2:54 p.m.  
Anonymous Anónimo manifestó al respecto que...

Benvolgut Geococcyx:

Supongo que el vocho era el producto sentimental de esta rentadora. ¿Viste la película 'La mexicana'? En esa peli, todos los gringos que llegan al aeropuerto le piden al de la rentadora de autos un coche "especial", o sea, uno antiguo, de esos que ya no pueden conseguirse en los EE. UU. Supongo que a mí me pasó igual, porque lo cierto es que es un trasto de mil demonios: duro, ruidoso, sin la más mínima comodidad... Un desastre como inversión, vaya, pero aún así va uno feliz con ese descapotabilito. Los que me dislocan son esos vochos que los han recortado y parecen un huevito, ¿los viste?

I feliç any nou! :)
Mus
(No sé si ustedes usan signos de exclamación iniciales.)

29/12/07 7:55 a.m.  
Blogger Geococcyx manifestó al respecto que...

No, no vi esa película. En casa tenemos un vochito no descapotable, del 92; sólo lo empleamos en caso de emergencia, pero va bastante bien. Yo no quise venderlo.
I bon any!

29/12/07 10:35 a.m.  
Anonymous Anónimo manifestó al respecto que...

mus dijo: pero aún así va uno feliz con ese descapotabilito. Los que me dislocan son esos vochos que los han recortado y parecen un huevito

jeesuuusssss

12/1/08 1:30 p.m.  

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